Aute y Villarán, alalimón poético con humor prágmatico
- Escrito por Blanca Corrales
Arriversos llenó el teatro Moderno con el espectáculo «Poemigario»
No era cuestión de honor, ni de venganza, sino de un reto con la poesía como arma, con «poemigas» como balas, que disparan pragmatismo sobre una realidad. Mano a mano, con la mesa llena de libros, con un par de copas y una botella de vino, Aute y Villarán, se bebieron a tragos todo el lenguaje, para «eruptar» esas «miguitas poéticas, que son breves porque tengo compasión del público» , apuntaba Aute.
Si alguien te dice que «Magritte es la pesCadilla de Darwin», no entiendes nada. Entonces, te muestran el cómo en un sinuoso e insinuante vídeo. Comenzaba el espectáculo «Poemigario» con una proyección de los micropoemas de Luis Eduardo Aute, una suerte de greguerías a su manera, ensoñadoras, personalísimas. Y tras esto, Antonio García Villarán comenzaba a «poemigar» con su definición de poesía, larga explicación que salía de su bragueta.
Dos voces poéticas bien distintas, dos generaciones que pueden distar medio siglo, pero un mismo gusto por las artes y sus rincones y un mismo sentido del humor. Chascarrillos y anécdotas se intercalaban con poemas en esta tertulia entre amigos, que ya comparten quince años de andanzas, con todo un teatro lleno como singulares invitados. Ya fuera para autoretratarse, como para diseccionar con un juego de palabras la cruda existencia, o para hablar de sexo, no faltaba el humor, «sin miedo al ridículo», que decía Villarán, y hasta, en un momento dado, el acompañamiento musical, no porque Aute cantara, sino porque le dio al manubrio de una caja de música.
El espectáculo caló entre los asistentes, que aplaudieron, rieron y hasta participaron en «el tongo» -uno de los poemas de Villarán- con ganas. Insistían en que no tenían nada preparado, pero quién lo diría disfrutando de este «Poemigario». También aplaudieron los representantes políticos que acudieron, como el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Guadalajara, Armengol Engonga; y la consejera de Fomento, Elena de la Cruz. Todo terminó mágicamente, con algunos espectadores levitando.
Arriversos continúa
Esta actuación es el corazón de la edición decimotercera de Arriversos, Festival de Poesía de Guadalajara, patrocinado por el Patronato de Cultura del Ayuntamiento arriacense, que comenzó con la inauguración de la exposición «Cien de cien» comisariada por la poeta Elena Medel, en la Biblioteca de Dávalos, y una Jam Session que contó con numeroso público. La programación poética continuará el jueves próximo con la presentación del libro de Mar García Lozano «Campos de la despedida. Una imagen de Gertrud Kolmar», y el viernes 29 de abril se presentará la obra Hebras de una hoguera» de la autora malagueña María Jesús Fuentes. Ambos actos tendrán lugar el la Biblioteca de Dávalos a las 19.30h en el salón de actos.
Arriversos concluirá el sábado 30 de abril en el salón de actos de la Biblioteca Dávalos a las 12:00h. Entonces, se presentará la revista «Mester de Vandalía» a cargo de su editora, la escritora María Jesús Fuentes, y tendrá lugar el encuentro-coloquio entre tertulias y agrupaciones de poetas de Guadalajara.